Thor es hijo de Odin, el señor de los dioses de Asgard, y Jord (también conocida como Gea), la diosa madre de la tierra. Odin deseaba tener un hijo, cuyo poder derivase tanto de la Tierra como de Asgard, y por eso había buscado a Jord. Con este fin, creó una cueva en Noruega para que Jord diera a luz a su hijo. Meses después, Odin llevó a su hijo a Asgard y Frigga lo crió como si fuera suyo. Cuando Thor se hizo adulto, Odin le informó de la existencia de otro Thor antes que él. También era hijo suyo, pero pelirrojo, no rubio como él. Este Thor fue asesinado por la Serpiente de Midgard durante Ragnarok, la destrucción de la versión previa de Asgard. Incluso el mismo Odin murió, pero los dioses supervivientes dieron origen a un nuevo Odin. Thor creció en el palacio de Asgard junto a Loki, quien había sido adoptado por Odin tras la muerte en combate de su padre, el Gigante del Frío Laufey. Desde la niñez Loki estaba celoso de su hermanastro al que odiaba. A la edad de ocho años, Odin envió Thor a la tierra de los enanos, porque Brokk y Eitri crearon tres tesoros para el soberano de Asgard. Uno de los objetos fue el martillo de Mjolnir. A Odin le encantó el martillo y declaró que su uso era reservado para Thor, que un día probaría que era merecedor de llevarlo. A la edad de 16 años recibió a Mjolnir y demostró ser un gran guerrero. |